Según el gran filósofo Hegel, y
yo lo suscribo, la contradicción es el verdadero principio de la realidad. Todo
lo real está sometido a una lucha de contrarios que se prolonga indefinidamente
en el tiempo, haciendo posible que las cosas evolucionen y se superen a sí mismas.
Ese proceso dialéctico descrito
por Hegel también se da en las personas. No hay ser humano que no haya percibido como en su interior bullen
fuerzas contrapuestas, que lo arrastran hacia objetivos distintos. Esa lucha de
pulsiones a veces se resuelve por el triunfo, transitorio, de una de las pulsiones sobre las
otras, que a su vez será la base para que se suceda una nueva situación de desequilibrio que vuelva a reiniciar el proceso.
Freud descubrió que gran parte de
esas luchas interiores se daban a un nivel inconsciente, sin que el sujeto se
apercibiese para nada de sus propias contradicciones.
LA FOTO DEL ARGENTINO
EN FACEBOOK
Esa foto en la que el argentino
aparece en una actitud presuntamente cómica, me ha hecho evocar, por una
extraña asociación de ideas ( muestra lo que quiere ocultar, alardea de lo que
en realidad carece, exhibe una falsa "chifladura", una postiza despreocupación, etc.), una anotación que el
argentino escribió en su Facebook, en concreto, la que dice:
“"No te dejo, ni deserto ni te traiciono. Nunca estaras fuera de mis plegarias. Solamente te querre aun mas profundamente, y te estare aun mas agradecido. Estaras siempre en mis pensamientos porque, en este mundo, eres para mi el unico ser querido."
CÓMO DESCUBRÍ DICHA
ANOTACIÓN?
Esa anotación fue escrita el 31
de Julio de 2009, tres días después de que tras proponerle indirectamente un
“final civilizado” a nuestra convivencia, el argentino me enviase un mail en
que afirmaba que mi propuesta le había sentado como “ un balde de agua fría en
pleno invierno” y que le llamara, si tenía algo que decirle.
Como su mail me pareció poco
conciliador, consideré que lo mejor era dejar pasar el tiempo, para que, tras
reflexionar sobre la convivencia que mantenía con él, se me aclarasen las ideas,
ya que por aquel entonces estaba muy confuso.
Pasados cinco días desde que el
argentino me enviara su último mail, consideré que me podría ayudar a tomar la
decisión más acertada echar una hojeada
a su “muro” del Facebook, porque por aquel entonces tenía la posibilidad de
echarle un vistazo. Hoy ya no puedo entrar en su Facebook, pero entonces, y sin
que él lo supiera, podía entrar. Así que aprovechándome de esa ventaja, fui a
su Facebook para inspeccionar si había escrito algo sobre mí o sobre nuestra
convivencia que me pudiera iluminar.
Aparte de la anotación antes
referida, no escribió nada más.
QUIÉN ES EL ÚNICO SER
QUERIDO DE ESA ANOTACIÓN?
Antes de responder, usando la
lógica más elemental, a la pregunta,
será conveniente que aclare algunos aspectos relacionados con la misma.
En primer lugar, hubiera sido
realmente lamentable que en un sitio destinado a exponer su estado de ánimo,
como es el muro del Facebook, el argentino no hubiese escrito nada en
referencia a nuestra convivencia. En mi opinión hubiera resultado muy triste
que el argentino no se hubiera sentido nada afectado por la creciente
desavenencia entre él y yo. Hubiera sido muy poco ético que su consciencia
ignorara los problemas surgidos entre los dos y que no hiciera nada para
intentar paliarlos. Baste recordar que, en momentos muy difíciles para él,
cuando nadie más se preocupó por él, le tendí mi mano para ayudarlo y lo hice sin pedir nada a cambio. En
Barcelona, sus “jefes”, a su manera, también ayudaron algo, pero se cobraron ese
auxilio a precio de oro. No hay duda que en el intercambio económico entre el
argentino y sus “jefes”, éstos salieron ganado mucho más que aquél. Los números
cantan. (Si, por poner un supuesto, uno trabaja un mes con unos chilenos a 20
euros cada turno, quiere decir que si hace 31 turnos va a cobrar 620 euros al
mes, lo que significa que esos chilenos deberían pagar 250 a la Seguridad Social, si
no los pagan, todo eso que se ahorran). En mi caso le cedí mi habitación para
que durmiera en ella. ¿Qué le dieron sus
“jefes”? Una suite, una habitación, un cuartucho con cucarachas? Dejo la respuesta
en el aire… Que uno se deje explotar
voluntariamente, eso no cambia las cosas. Más bien las agrava.
En fin, era natural y lógico que
el argentino escribiera algo sobre el delicado momento por el que pasaba
nuestra convivencia. De hecho, en otras
ocasiones ya había escrito sobre ella, aunque sin mencionarme.
LA CRONOLOGÍA DE LOS
HECHOS
El argentino, bastante irritado
por mi propuesta de concluir nuestra convivencia, me envió un mail el 28 de
julio en que me conminaba, en el caso de que tuviera algo que decirle, a llamarle.
El argentino, en coherencia con
su petición, esperó unos tres días a que le llamara. Como no se produjo, por mi
parte, ninguna llamada, decidió dar por zanjada unilateralmente la convivencia,
convencido de que yo había renegado de él para siempre.
La noche del 31 de julio decidió
materializar la ruptura escribiendo en su muro la notación anterior. De esa
forma tan insólita ponía punto y final a lo
que en caso de concluirse, se hubiera de haber concluido de acuerdo con
las más elementales normas del civismo y de la educación, así al menos lo
hubieran hecho la inmensa mayoría de personas.
QUIEN ES EL
DESTINATARIO?
Procedamos con lógica.
1.- La anotación tiene el sello
inconfundible del Argentino. Su estilo idealista, lleno de buenos propósitos, es inconfundible,
asimismo como su apelación al amor y a la religión. Él es, sin duda, su autor. Compárense si no a éstas otras palabras también
escritas por él: “me recuerda que lo mas importante que aprenderé en la vida es a amar y
ser amado, y lo único que permanecerá sera la luz que esos actos de amor
dejaran marcado en mi espíritu”. La cita no la extrajo de ningún libro, la
creó él mismo.
2.- La anotación está en presente
y se refiere a alguien de este mundo, por lo tanto no se puede referir a nadie
que viva en la Argentina ni a ningún personaje religioso como Jesús o San
Francisco. Si la anotación se refiriera a algún hecho del pasado, el que use
verbos en presente revelaría que ese hecho está muy vinculado a algo del
presente que le recuerda el pasado más próximo.
3.- La anotación da a entender
que el argentino ha dejado muy recientemente a una persona. Luego se puede
aplicar perfectamente a mi caso.
4.- El argentino afirma que está
muy agradecido a esa persona por lo que ésta ha hecho por él. Esto también se
puede aplicar, y de forma muy particular, a mi caso.
5.- El argentino afirma en su
anotación que va a desertar respecto a una persona. Esta es la palabra clave de todas. Puesto que desertar es
abandonar, por parte de un militar, su puesto sin comunicarlo previamente a sus
superiores. Eso es justo lo que había urdido el argentino en ese momento: abandonar el piso en que convivía conmigo sin
decir adiós, sin decir nada de nada, como un desertor. Esta palabra bastaría
por si sola para vincular la anotación con la convivencia.
6.- El argentino da a entender
que aunque parezca que va a traicionar a alguien, que lo va abandonar, en realidad no lo va a
hacer porque siempre tendrá a ese alguien en sus pensamientos, lo
cual resulta de una incongruencia total, es como considerar que es lo mismo
hacer el amor con una persona que soñar que se hace el amor con esa persona.
En fin, todos los indicios
apuntan a que esa anotación se refiere a nuestra convivencia. Todos menos uno.
Cuál? El siguiente.
7.- El argentino afirma que amará
más profundamente a esa persona que
aparentemente va a dejar. Yo nunca me sentí querido por el argentino.
Sus actos respecto a mí siempre demostraban una indiferencia, un desprecio, que
me entristecía mucho.
8.- El argentino acaba su cita
con una afirmación incoherente. Dice que ese ser al que va a dejar es el único
ser querido en este mundo. Chúpate esa’¡¡¡ Pero si es el único ser querido para
él, por qué va a separarse de él? Eso no tiene sentido alguno¡¡¡¡ Tampoco no
muestra ninguna tristeza ni congoja por esa separación de su único ser querido,
lo cual resulta muy sorprendente. Parece como si deseara esa separación. Parece
como si ese ser querido no fuera en realidad un ser querido. Por qué no hay
ningún signo de tristeza por esa separación? Algo así como: lamento mucho, no
dejo de llorar, me desespera, no sé qué voy a hacer sin ese ser querido.-.. Sin
lugar a dudas, esta falta de dolor por dicha separación revela claramente que
se refería a mí.
SIGNIFICADO DE LA
ANOTACIÓN.
No tengo la menor duda de que con
esa anotación el argentino pretendía absolverse, perdonarse a sí mismo ante su
conciencia por la bajeza moral que estaba a punto de perpetrar. Cualquier medio
le servía para conseguir dicha autoexpiación. Le daba igual que tuviera que
engañarse a sí mismo o adulterar la realidad.
MI SENSACIÓN ANTE EL
ESCRITO DEL ARGENTINO
Mi reacción ante esa anotación
fue de escepticismo absoluto. No me sentí nada halagado porque me considerase
el único ser querido, porque resultaba obvio que era una estratagema para que
su acto de traición le resultara más asumible.
Creo que el argentino es la persona que, a pesar de tener muchos motivos para
quererme, me ha querido menos, al menos de forma pública.
LA INFINITA DISTANCIA
ENTRE LO CONSCIENTE Y LO SUBCONSCIENTE
Y sin embargo, alguna verdad debe
haber en todo ello. O si no la hay, debe de tratarse de una mentira que se ha
convertido, a fuerza de negarla y de deformarla, en una verdad de conveniencia.
Una verdad que sólo el argentino debe sentir, en lo más profundo de él, como
una verdad; por mi parte recelo de ella.
Aunque quizás a nivel
subconsciente sí que sea una verdad que refleje un sentimiento sincero, una
pulsión obscura que acaba emergiendo a nivel consciente en la forma de ese
“único ser querido”. Una especie de pulsión que no acabó de cuajar o de
consumarse, sin el influjo de la cual
nunca hubiera aceptado mi ayuda.
POR QUÉ ESE “AMOR” DEL
ARGENTINO NUNCA AFLORÓ ANTE MI PRESENCIA?
Así, a vuelo de pluma, porque
temió no ser correspondido. De hecho, podría citar muchos ejemplos en que el
argentino buscó mi afecto, y al sentir o creer que yo no le daba ese afecto, se
encerró en sí mismo, distanciándose de mí. Cada vez que consideró que no le brindaba el afecto
que se merecía, se mostró visiblemente irritado contra mí.
Porque en su falta absoluta de
empatía, consideró que yo no era capaz de dar afecto, tenía, por decirlo de
alguna forma, estropeadas mis capacidades afectivas.
Porque su orgullo le impedía
mostrarse afectuoso con una persona por la cual se había sentido, con
anterioridad, ofendida.
Porque su orgullo le hacía creer
que si se mostraba afectuoso conmigo, de alguna forma se estaba vendiendo, se
estaba rebajando ante mí.
Porque ese amor respondía a unos
instintos sucios que él consideraba que yo nunca iba a tolerar.
POR QUÉ NO AFLORÓ MI
AFECTO POR EL ARGENTINO?
Aunque en ocasiones anteriores,
ya lo he dejado, más o menos, traslucir, voy a exponerlo de nuevo.
Yo esperaba encontrar a un ser
desvalido, inseguro, derrotado, triste, desolado, angustiado, deprimido,
etc. Y, en cambio, me encontré a un tipo
prepotente, muy seguro de sí mismo, que miraba a los demás por encima del
hombro, un ser mezquinamente orgulloso, QUE
ME DESPRECIABA Y ME HACÍA EL VACÍO, QUE NO ME TRATABA COMO A LOS DEMÁS.
YO NO PUEDO DAR AFECTO A UN SER ASÍ. Sólo puedo sentir lástima por él.
A mí me gustan sus miserias, y no las presuntas grandezas ni la forzada seguridad ni menos su artificiosa simpatía ni su ridícula y poco creíble "locura" con las que quiere dar una falsa imagen de sí mismo para ser aceptado por el mayor número de personas.
A mí me gustan sus miserias, y no las presuntas grandezas ni la forzada seguridad ni menos su artificiosa simpatía ni su ridícula y poco creíble "locura" con las que quiere dar una falsa imagen de sí mismo para ser aceptado por el mayor número de personas.
EL ARGENTINO SEGÚN FREUD
La obvia disparidad entre lo que
evidencia la anotación, ese amor tan sublime, y mi sentimiento de no recibir
nada de amor por parte del argentino, revela a todas luces un conflicto mental,
una tensión psíquica que por fuerza indica una turbiedad a nivel del
inconsciente que aflora a través de deformaciones y mixtificaciones. No tal
cual es, sino transformada en algo que resulte aceptable para el SUPERYO DEL
ARGENTINO.
Según Freud, el Yo de cada
persona busca la racionalización del placer para que la satisfacción de los
impulsos más primarios no perjudique sus aspiraciones sociales. Gracias al Yo,
el individuo es capaz de adaptarse a las normas sociales, de lo contrario su
indómita búsqueda del placer podría llevarle a la autodestrucción. El yo se
rige por el principio de realidad y se vale de los mecanismos de defensa para
conciliar el placer con el deber.
MECANISMOS DE DEFENSA
DEL ARGENTINO.
Son recursos inconscientes que
utilizan las personas para hacer frente a situaciones más o menos difíciles de
frustraciones, ansiedad, miedo, inseguridad, etc. Con el objetivo de que dichas
situaciones no les hagan daño. Los mecanismos de defensa son un medio con el
que la persona se engaña a sí misma,
y para protegerse recurre inconscientemente a tácticas mentales para falsificar
y distorsionar experiencias e ideas amenazantes. Cuando una persona se
encuentra ante una situación de estrés, miedo, angustia, etc., lo más usual es
que erija ante sí un escudo, un mecanismo de defensa para protegerse de dicha
situación, aumentando su sensación de seguridad, efectividad o utilidad.
Ese “amor” tan profundo y
espiritual que se desprende de la notificación del argentino, ese considerarme
“el único ser querido” resulta tan contrario a lo que en realidad ocurría entre
nosotros dos, que por fuerza ha de revelar una voluntad de autodefensa por
parte del argentino para ocultar así algo que de presentarse en toda su cruda
realidad le causaría graves remordimientos morales o tremendas incomodidades
psicológicas.
Cuáles son esos mecanismos de
defensa que se pueden observar en esa anotación?
1- FORMACIÓN REACTIVA: Cuando la fuerte
represión de los impulsos se acompaña de una tendencia opuesta en forma de
comportamientos y sentimientos reprimidos, esta tendencia es lo que llamamos
formación reactiva. Una madre que está demasiado preocupado por su hijo puede
ser un fiel reflejo de la hostilidad hacia él.
El argentino experimentaba en su
inconsciente sentimientos de odio o rencor hacía mí, que debido a mi caridad hacia él y a sus
creencias religiosas, le resultan inaceptables, por eso tales sentimientos se
transforman en su contrario, es decir, en una amor exagerado hacia mi persona.
2.- RACIONALIZACIÓN:
Existe en nosotros una constante lucha para dar sentido a nuestro mundo de
experiencias, la búsqueda de explicaciones para nuestros fenómenos internos,
nuestros comportamientos y sentimientos. Para cumplir esta misión, evitar
problemas y mantener la autoestima, hemos creado "explicaciones"
altamente racionales a los factores emocionales y motivacionales para
justificar a nuestro yo (ego), buscamos "buenas razones", aunque
falsas, de nuestras actitudes y fracasos.
El argentino justifica su marcha sin decir
adiós ni dar las gracias, argumentando que en el fondo no me abandonaba, ya que
me tendría siempre en su pensamiento, con lo cual estaba sugiriendo que de
alguna manera yo siempre estaría con él,
pero este argumento no se sostiene por ninguna parte. Está confundiendo
dos planos de la realidad incompatibles entre sí: lo mental y lo material. Si
se va de mi lado, es obvio que no estará conmigo. Que piense en mí, no quiere
decir que esté conmigo. Son dos cosas muy distintas.
3.- AISLAMIENTO: Es el mecanismo de defensa que consiste en un sistema
de separación para que los sentimientos perturbadores pueden ser separados, de
modo que la persona se vuelve completamente insensible en relación al
acontecimiento sublimado y lo comenta como
si hubiera sucedido a otra persona. Nuestro pensamiento parece ser
capaz, en determinadas circunstancias, de mantener, uno al lado del otro, dos
conceptos incompatibles lógicamente sin llegar a tener consciencia de sus
diferencias evidentes.
Consiste en separar la
representación desagradable que impide la relación angustiosa entre el objeto y
los pensamientos generadores de angustia. Así se da una separación del
componente afectivo, protección de las heridas afectivas, comportamiento
estanco respecto a críticas.
El argentino separa los
sentimientos de hostilidad que tuvo conmigo de mi persona, de manera que
dejo de ser para él esa persona insoportable e incompatible con él, y paso a
convertirme en el único ser querido, aquel que le ayudó de forma
extraordinaria. Así puede reconocer gratitud hacia mí por haberle ayudado, sin
experimentar sentimientos de rechazo.
4.- NEGACIÓN: La negación puede ser considerada como el mecanismo de defensa más ineficaz, ya que se basa simplemente en negar los hechos que se han producido a base de mentiras que terminan por confundirse y en la mayoría de veces se contradicen las unas con las otras.
El argentino dice que niega, para no sentirse mal consigo mismo, que no
me va a dejar, pero es obvio que me deja, luego incurre en contradicción.
Además dice que soy el único ser querido, pero por otro lado me deja, lo cual
no tiene ni pies ni cabeza y además no da muestras de que tal abandono le
produzca mucha pena.
5.- REPRESIÓN Probablemente es
el mecanismo más frecuente con que se bloquean las sensaciones y recuerdos, es
una forma de olvido. Mediante este mecanismo todo lo que le molesta al sujeto a
nivel consciente se reprime, es decir, se repliega al subconsciente y de esta
manera se saca de la conciencia las ideas y recuerdos que provocan ansiedad.
El argentino reprime, en su anotación, todos los recuerdos
desagradables. Así no cita ni las desatenciones que tuvo conmigo ni las
descalificaciones que usó, etc. Necesita omitir esa parte “fea” para poder
convertirme en su “único ser querido” y para poder mostrarse agradecido hacia mí.
6.- SUBLIMACIÓN: consiste en encontrar formas socialmente
aceptables para satisfacer, al menos parcialmente, las pulsiones del Ello. Se caracteriza por presentar una
inhibición del objeto y una desexualización del mismo. Es el resultado de los impulsos subyacentes que encuentran vías aceptables para lo que se reprime.
El argentino experimentaba en su inconsciente odio o deseos oscuros hacia mí, como tales pulsiones le resultaban intolerables por diversos motivos, entre los cuales hay que destacar el sentimiento de gratitud que sentía hacia mí, o mi manera “espiritual” de ser y de comportarme (ante la cual se sentía un promiscuo muy salido), las sublimó mediante esa anotación que embellece lo que es “ vergonzoso” para su Superyo.
7.- DISTORSIÓN. es una forma de error en el procesamiento de información.
Entre las
distorsiones más importantes hay que destacar las siguientes:
Pensamiento
polarizado o dicotómico (todo o nada) - Interpretar
los eventos y personas en términos absolutos, sin tener en cuenta los grados
intermedios, evidenciado en el uso de términos como "siempre",
"nunca", "todos", cuando su uso no está justificado por los
acontecimientos propiamente.
El argentino se refiere a mí como el único ser querido.
Abstracción
selectiva o Filtro mental - Enfocarse exclusivamente en ciertos aspectos
El argentino sólo se refiere al aspecto amoroso,
dejando de lado otros aspectos muy relevantes en toda convivencia.
Sesgo
confirmatorio: tendencia a sesgar la realidad, tanto en percepción
como en valoración, para que encajen con ideas preconcebidas.
El argentino poda la realidad de nuestra
convivencia de manera que resulta, faltando del todo a la verdad, una
convivencia idílica en la que parece que los dos nos quisimos mucho, cuando es
justo lo contrario.
Magnificación Sobreestimar la manera de ser de eventos o
personas
El argentino exagera hasta límites insospechados
su muy limitado, al menos a nivel consciente, afecto hacia mí. ( te querré aún
más profundamente).
ACTING OUT O PASO AL ACTO: expresión directa de un deseo inconsciente o impulso,
sin tener consciencia de la emoción que acciona ese comportamiento tan expresivo.
Es un acto que expresa el deseo de forma simbólica.
El argentino escribe, impulsivamente, en su blog
la anotación sin que nadie se lo haya pedido ni sin que tenga mucho sentido, tan
sólo para neutralizar una desazón que le inquieta cada vez más. Lo normal
hubiera sido que me la hubiera comunicado a mí.
ANULACIÓN
RETROACTIVA: Mecanismo psicológico mediante el cual el sujeto se esfuerza en actuar
como si pensamientos, palabras, gestos o actos pasados no hubieran ocurrido;
para ello utiliza un pensamiento o un comportamiento, dotados de una significación
contraria.
El
argentino elimina de su anotación todos los sucesos que le resultan
perturbadores o indeseables, de los cuales se arrepiente y que de alguna manera
empañan la buena imagen que quiere tener ante los demás y ante su conciencia.
ESCISIÓN
DEL OBJETO: Mecanismo descrito por
Melanie Klein y considerado por esta autora como la defensa más primitiva
contra la angustia: el objeto al que tiende las pulsiones eróticas y destructivas
es escindido en un objeto «bueno» y un objeto «malo», que entonces seguirán destinos
relativamente independientes dentro del juego de introyecciones y proyecciones.
Es
evidente que en la anotación el Argentino ha escindido mi persona en dos
mitades contrapuestas. Una, a quien él llama el “único ser querido”, merece su amor, mientras que la otra ha sido, a causa del malestar sentimental que
le genera, suprimida.
Compensación: Este mecanismo
consiste en silenciar un sentimiento de inseguridad exagerando un rasgo real o
deseable.
No hay
duda que con la anotación el Argentino quiere diluir el sentimiento de
considerarse una mala persona por no ser agradecido o irse sin despedirse. No
quiere pasar ante su propia consciencia ni ante la mirada de Cristo como
alguien que no ama a su prójimo. Compensa su mal obrar con esa anotación a través
de la cual expresa sus buenos sentimientos, es decir, su buen obrar.
Fantasía: Este mecanismo sería algo parecido a soñar despierto, al dar
rienda suelta a su fantasía algunas personas escapan de sucesos desagradables
Se da cuando la persona, ante la insatisfacción que siente, recurre a la
imaginación y experimenta a través de los sueños lo que no puede experimentar
en la realidad.
El
argentino intenta a través de su anotación convertir en éxito lo que fue en
realidad un fracaso. Parece que nos hubiéramos querido mucho durante la
convivencia, cuando en verdad fue al revés. Ese éxito ficticio por supuesto es
sólo fruto de su fantasía.
INTROYECCIÓN: mecanismo de defensa
en el que las amenazas externas se internalizan, pudiendo neutralizarlas o
aliviarlas; de manera similar, la introyección de un objeto o sujeto amado (por
ejemplo, una persona de gran importancia) reduce la ansiedad que produce el
alejamiento o las tensiones que causa la ambivalencia hacia el objeto.
El argentino para no ser menos que yo, para no
sentirse mala persona en comparación a mí, alardea de su amor hacia mí, porque
de alguna forma considera que yo también se lo he tenido. Se pone así,
interiorizando un rasgo que él atribuye a mi persona, a mi altura. Porque es
evidente que si le ayudé es porque sentí afecto hacia él. Ese afecto es el que él
internalizar.
SUBSTITUCIÓN: Mecanismo de defensa por el que el individuo se enfrenta a
conflictos emocionales y a amenazas, de origen interno o externo, reemplazando
una meta, emoción u objeto inasequible o inaceptable, por otro más asequible o
aceptable.
El argentino en lugar de dar la cara, de hacer frente a sus
compromisos, de hablar conmigo sobre el
final de la convivencia, elige escribir esa anotación con la cual da, ante su
conciencia, por finiquitada su relación conmigo. Cambia una cosa por la otra.
LA PROCRASTINACIÓN es la
acción o hábito de postergar actividades o situaciones que deben atenderse,
sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes y agradables.
El argentino en lugar de hablar conmigo, prefiere
escribir esa anotación en su blog.
ANULACIÓN Es de estructura obsesiva. Consiste en acciones
impulsivas o pulsiones agresivas que “hay que deshacer”, como si nada hubiera
pasado, anulación regresiva de la realidad. Se manifiesta en: se cancela el
acto en la conciencia con la expiación para borrar lo molesto, supresiones de
ideas, sentimientos, etc... y retorno a lo ya hecho para neutralizar “el mal”,
afrontándolo mediante una acción opuesta a fin de que la primera se convierta
en “no acontecida”. Es un mecanismo de defensa en el cual una persona trata de
"deshacer" un pensamiento insano, destructivo o amenazador otra cosa
o acción con un comportamiento contrario. Por ejemplo, después de pensar acerca
de ser violento con alguien, uno sería demasiado agradable o atento a ellos.
El argentino intenta anular con esa “declaración de amor” hacia mi
persona todas las desatenciones y brusquedades que ha tenido conmigo. Si en el
pasado expresó odio o indiferencia, ahora expresa afecto.
FANTASÍA AUTISTA Es la realización imaginaria del deseo mediante
fantasías excesivas y formas ilusas como forma de descargar las emociones,
escapando de relaciones interpersonales y la acción eficaz para resolver
auténticamente los problemas.
Ese “único ser querido” y ese “amor” son sin lugar a dudas
imaginaciones del argentino que no se ajustan para nada a la realidad, y con
las cuales pretende escapar de sus obligaciones, que serían las de intentar
arreglar las cosas hablando con los demás, en lugar de eso se encierra en sus
fantasías.
IDEALIZACIÓN Implica evitar la hostilidad hacia la misma persona de
la que se depende, normalmente va acompañada de una estructura narcisista. La
persona exagera cualidades de los demás, idealiza la persona amada, tiene una
percepción parcial y subjetiva, son enamoradizos, etc...
El argentino, al declararme el “único ser querido”, me está
idealizando. Bajo esa idealización se esconde con frecuencia la agresividad que
se experimenta hacia una determinada persona.
RETIRO: El retiro es una forma más grave de defensa. Implica EL
ALEJAMIENTO de uno mismo de los acontecimientos, estímulos, interacciones, etc
por el temor de que nos puedan recordar pensamientos y sentimientos dolorosos...
El argentino a través de la anotación se aleja de la realidad de la
convivencia, sumergiéndose en una especie de mundo ideal que le hace sentir
bien consigo mismo.
CONCLUSIÓN FINAL.
No tengo la menor duda de que esa anotación es el reflejo de tensiones,
deseos oscuros, que bullen en el inconsciente del argentino. No tengo la menor
duda de que el argentino experimentaba sentimientos de odio, de agresividad o de deseo (o de todos a la vez) que al no poderlos consumar, acaban emergiendo a través de sus
contrarios, por eso me idealiza como a un ser espiritual y me muestra su amor.
El argentino es consciente en todo momento que me debe gratitud y afecto por lo
mucho que he hecho por él, y que muy pocos habían hecho, por eso experimenta
esa sensación de malestar profundo, a la cual quiere reprimir a través de esa
anotación tan fantasiosa.Es normal dar las gracias a quien te ha ayudado, es natural despedirse de la persona con quien has convivido, hemos sido educados para obrar así, tenemos interiorizadas en nuestro ser esas normas sociales, y no podemos dejar de cumplirlas sin sentir una desagradable sensación de culpa. Para eludir sentirse culpable ante su propia consciencia moral, el argentino redacta esa anotación, presentándome como su "único ser querido", actuando así siente que se ha portado debidamente conmigo, tal como establecen las más elementales leyes humanas.
En fin, me causa una lástima enorme que alguien, como el argentino, que ha estudiado durante tantos años psicología, no sepa gestionar de forma madura y responsable sus propias emociones, dejándose arrastrar y atormentar por sus propios demonios y fantasmas, y dejando en el prójimo una sensación de frustración tan hiriente.
En fin, me causa una lástima enorme que alguien, como el argentino, que ha estudiado durante tantos años psicología, no sepa gestionar de forma madura y responsable sus propias emociones, dejándose arrastrar y atormentar por sus propios demonios y fantasmas, y dejando en el prójimo una sensación de frustración tan hiriente.