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domingo, 12 de mayo de 2013

UNA MUERTE ANUNCIADA


UNA MUERTE ANUNCIADA

Estoy mal y presiento que van a venir días tristes para mí. Para intentar mitigar lo más posible esta tristeza voy a hacer lo que siempre hago en estos casos, escribir. En esta ocasión, para tocar el tema de soslayo, voy a escribir sobre la historia real de Manel, un amigo mío de Lleida, al que hace ya unos cuantos meses que no  veo.

LA HISTORIA DE MANEL Y FERNANDO

MANEL es un chico de un pueblo muy cercano a Lleida,  que a sus 40 años  todavía vive con sus padres. Estudió ingeniería forestal y durante 4 años llegó a ser el alcalde de su pueblo.  Es homosexual, pero hasta los 35 años estuvo en el armario. Un día, cansado de esconder su condición sexual, tuvo las agallas de contárselo a sus padres, quienes no se tomaron muy bien la confesión. A partir de ese día, el tema homosexual fue tabú en la familia, y de él nunca se hablaba. Los primeros contactos de Manel con otros chicos empezaron a los 34 años, antes sólo había mantenido escaramuzas fugaces con  alguna chica. Al principio sólo buscaba sexo, y fue precisamente en una de esas citas esporádicas que conoció a Fernando.

FERNANDO es un chico de un pueblo cercano a Córdoba también de 40 años, que desde muy temprana edad tuvo clara su condición sexual, por lo cual no tuvo el menor reparo de hacerla partícipe a su familia. A los 35 años emigró a Tarragona en busca de mejores oportunidades laborales. En concreto, se instaló en Reus, donde conoció a un fotógrafo italiano con quien inició una relación de pareja, que duró por espacio de unos pocos años. Justo al dejar  al fotógrafo, conoció a Manel. Al principio entre los dos sólo hubo encuentros sexuales, pero en uno de esos encuentros en un hotel surgió la chispa entre ellos.

RELACIÓN DE MANEL Y FERNANDO

Fernando vivía en un piso de alquiler, junto a su hermano, en Vilaseca, cerca de Reus. Estudiaba por la noche y por el día trabajaba. Manel continuaba viviendo con sus padres, hacía de interino en algún instituto y se preparaba para presentarse como alcalde en las próximas elecciones, pues había sido desalojado por una moción de censura de la alcaldía.
Durante casi 4 años sólo se vieron los fines de semana. Cuando llegaba el viernes por la tarde, Manel cogía su coche y se desplazaba hasta el piso de Fernando. Siempre fue Manel quien se desplazó, fin de semana tras fin de semana. Durante el resto de la semana se llamaban. En principio todo parecía ir viento en popa. Era, la suya, una relación muy consolidada. A Manel no se le hacía pesado ir los fines de semana y a Fernando le iba de maravilla la disponibilidad de su novio. Era la primera relación de Manel y quizás por esto la vivió de forma muy intensa, magnificando los sentimientos y las experiencias.

CARÁCTER DE MANEL Y FERNANDO.

Eran ambos muy diferentes en la forma de ser.

 MANEL, aunque algo tímido, era un hombre de acción, no por casualidad llegó a ser alcalde. Era muy activo, contaba con muchos amigos y su agenda siempre estaba repleta de actividades.  

FERNANDO era más bien un hombre pasivo, poco sociable, que en Vilaseca apenas se relacionaba con nadie. Su vida social se reducía a su hermano y, claro, a Manel. Había fines de semana que trabaja, a pesar de lo cual Manel iba igualmente a su piso. Para definir mejor a Fernado reproduciré las palabras que le dedicó Manel: Fernando es un tipo cuya máxima actividad en un día puede consistir en ir a comprar una bolsa de patatas en el supermercado”. Esa actividad contrastaba vivamente con la de Manel, quien en un día podía ir al gimnasio, asistir a una reunión  de su partido, quedar con unos amigos a cenar, etc. Siempre tenía muchísimas cosas que hacer… siempre que estaba en Lleida, porque cuando iba al piso de Fernando, podía pasarse muchas horas sentado en el sofá.

ENFRIAMIENTO DE FERNANDO Y MANEL.

Lo que había sido una historia bonita acabó de la peor de las maneras. Todo se precipitó en el mismo momento en que el hermano de Fernando dejó el piso que compartían. A partir de entonces Fernando empezó a sentirse solo y acuciado por dicha soledad, empezó a insistir a Manel en que estaba dispuesto a irse a Lleida para vivir junto a él. Manel le contestó que de momento eso no podía ser, ya que primero debía concentrar todas sus fuerzas en las próximas elecciones. Si salía elegido alcalde, entonces consideraría lo de vivir juntos, pero hasta ese momento, le parecía que sería una decisión muy precipitada, sobre todo porque ninguno de los dos disponía de un trabajo estable. Esta respuesta desilusionó bastante a Fernando, quien a partir de entonces se mostró más distante con él, menos cariñoso. Ese enfriamiento de la relación hizo ver a Manel que  eran muy distintos el uno del otro, y que de hecho había muy pocas cosas que los unieran, que quizás se había deslumbrado un poco por ser esa su primera relación con otra persona. A partir de entonces, empezaron las discusiones y las caras largas.

FINAL DE LA RELACIÓN

El último verano de su relación, Fernando decidió invitar a Manel a pasar  unos días en su pueblo de Córdoba. No fueron malos días, pero a la vuelta todo se precipitó.
Cuando al siguiente fin  de semana Manel fue al piso de Fernando para estar con él, éste se negó a abrirle la puerta. Manel no se  podía creer que con ese final tan feo Fernando diera por finiquitada una relación de 4 años. Tanta era la indignación de Fernando que éste se negó a que Manel recogiera sus cosas personales de dentro del piso. Incluso en un acceso de ira, Fernando llegó a decirle a Manel: “Aquí sólo vienes a follar”. Así, de esta forma tan lamentable, se acabó una relación de casi  4 años que parecía presagiar un bello futuro.

SITUACIÓN ACTUAL DE MANEL Y FERNANDO

FERNANDO  mantiene un perfil en activo en una página de encuentros, de donde deduzco que todavía no ha rehecho su vida.

MANEL pudo rehacer su vida al cabo de unos pocos meses. Ahora está con un chico de un pueblo cercano a Lleida. Viven separado, pero supongo que deben tener planes futuros para vivir juntos.

CARLES Y DAVID, SEMEJANZAS Y DIFERENCIAS.

Salta a la vista que entre la relación de Manel y Fernado y la mía con David hay parecidos y también diferencias.