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martes, 29 de enero de 2013

LAS TRES CONFERENCIAS DEL ARGENTINO


LAS TRES CONFERENCIAS DEL ARGENTINO

Sin lugar a dudas entre las razones que me empujaron a enviarle esa felicitación de cumpleaños que, para mi total estupefacción, acabaría en la tristísima convivencia de los dos, se pueden enumerar la profunda impresión que me causaron sus conferencias. Especialmente una dedicada, ni más ni menos, a la BIBLIA. En mi absoluta ingenuidad me imaginé que alguien interesado en dar una conferencia sobre semejante tema podría ser cualquier cosa menos un “chico de discoteca” o “ una mariquita frívola” o “ un vividor sin escrúpulos morales”. Me equivoqué completamente. De la misma manera que la historia reporta las orgías, los asesinatos y las corrupciones a las que se entregaron numerosos Papas, que alguien imparta una conferencia sobre la Biblia no implica, ni mucho menos, que tal individuo sea un dechado de moralidad o rectitud. En el caso del argentino, todas mis suposiciones resultaron infundamentadas. Menudo chasco colosal me llevé con él.

LA LOGOTERAPIA

La primera conferencia de la que tengo noticia versó sobre la logoterapia. La dio en un centro de terapias naturales en el que desempeñaba una intensa colaboración.

QUÈ ES LA LOGOTERAPIA?

Dicho un poco a lo bruto no es más que una religión al revés. Si en la mayoría de las religiones el fin último es la vida sobrenatural, mientras que la vida terrenal es sólo un simple medio para conseguir la plenitud en el más allá. En la logoterapia es justo al revés, el fin último es el bienestar terrenal, sobre todo a nivel psíquico, mientras que la vida espiritual es sólo un medio para alcanzar el anterior fin. Así mientras que los guardianes de la moral cristiana   priorizan lo espiritual frente a lo material, los psicólogos de la logoterapia se valen de las creencias religiosas para garantizar a sus pacientes una saludable vida psíquica en este mundo. A estos psicólogos les importa, en el fondo, un pepino si las creencias religiosas de que se valen son ciertas o no, si el alma de sus pacientes se salvará o no, lo único que les interesa es que sus pacientes sanen aquí, se sientan bien consigo mismos en este valle de lágrimas. En lugar de recetar pastillas o terapias, recetan “creer en Algo Superior”, porque eso aportará un sentido a la vida angustiosa del enfermo, y ese sentido ayudará a quitar las angustias y miedos, mejorando su salud psíquica.

EL FRACASO DE LA LOGOTERAPIA.

La verdad sea dicha, en una sociedad como la contemporánea que galopa, alocadamente, hacia el ateísmo, la logoterapia tiene muy poco que hacer. Salvo en algunas zonas muy reducidas, su presencia es más bien residual.

EL INTERÉS DEL ARGENTINO POR LA LOGOTERAPIA.

La caprichosa y extravagante  forma de abordar la religión católica por parte del argentino, sólo se entenderá si se tiene en cuenta que su conversión se realizó a través del influjo de la logoterapia. Al argentino no le preocupan para nada los dogmas de dicha religión, lo único que le importa es conseguir, gracias al sentido que la fe aporta a su vida, la paz mental. Esa paz, ese vivir en un mundo con “sentido”, y no la salvación de su alma, es lo que realmente ha inclinado al argentino a declararse seguidor de las enseñanzas del Cordero de Dios.

LA CONFERENCIA SOBRE LA BIBLIA

El argentino se encargó de promocionar por los medios a su alcance dicha conferencia, aunque no sé si llegó a impartirla. Resulta muy revelador que eligiera dicho tema. Entre otras cosas porque sus conocimientos bíblicos y sobre todo vetestamentarios son más bien escasos. Pero como en otras muchas ocasiones en su vida, no se trataba tanto de explayarse sobre la Biblia como de dar una conferencia, porque de esa manera subía su autoestima en unos momentos especialmente difíciles para él.
Seguramente habrá leído bastante el Nuevo Testamento, desgraciadamente no creo que se haya dejado influir por las ideas que allí se exponen. Su egoísmo y su orgullo cuando menos han salido indemnes, y campean a cuerpo de rey por su alma.

LA TERCERA CONFERENCIA : LA AUTOCONFIANZA EN UNO MISMO.

Resulta realmente chocante que en uno de los peores períodos de su vida, el argentino sacase fuerzas de su flaqueza, y en lugar de dejarse vencer por el desaliento, sacando pecho, demostrándose a sí mismo que no estaba para nada ni abatido ni vencido, decidiera dar una conferencia sobre cómo salir adelante en momentos difíciles, sobre cómo cultivar la propia autoestima, etc.  Es evidente que ha leído muchos libros de autoayuda y de asistencia psicológica, y que gracias a ellos ha ido modificando su carácter y sus costumbres. A ellos, y no a las enseñanzas de San Pablo o de San Francisco, se deben las peculiaridades y las extravagancias de su personalidad. Sobre todo a su mala asimilación, a su tomarse al pie de la letra consejos que se debían de haber interpretado de forma más laxa y menos taxativa. No creo que nunca sea consciente de los estragos que tales libros han perpetrado en su relación con los demás. Si algún día llega a ser consciente, creo que sentirá vergüenza ajena.

EL PEOR RASGO DE SU PERSONALIDAD

Sin lugar a dudas es la fe ciega en sí mismo, y sobre todo en sus decisiones. Su fanática adhesión a las directrices expuestas en los libros de autoayuda, de las cuales es un ferviente seguidor, le ha llevado a enaltecer su amor propio hasta límites que rayan lo enfermizo. Ya porque ha leído muchos de esos libros, ya porque ha asistido a muchas charlas donde se difundían las mismas ideas, lo cierto es que el argentino ha desarrollado una autoestima realmente hipertrofiada, que le impide tener el menor sentido crítico sobre sí mismo, que le empuja a considerar como enemigos a cualquier persona que le recrimine cualquier acto, por banal que sea este.

EL MOTIVO DE SU GARRAFAL INGRATITUD

Su absoluta falta de sentido crítico que le impide, una vez tomada una decisión,  dar marcha atrás. 
No se podía ir sin decir adiós a quien le tendió una mano: cualquier persona se hubiera dado cuenta de la ofensa y del despropósito que suponía una decisión así. Su exagerada autoestima sólo le ha servido para reforzar de forma contraproducente a su orgullo. Se ha creído tanto lo que dicen los libros de autoayuda sobre la importancia de fomentar la autoestima que al final ha eliminado toda autocrítica, tan necesaria para el sano desarrollo de las capacidades humanas. Se equivocó y mucho al decidir no despedirse de quien le abrió las puertas de su casa, sobre todo porque él muy bien sabía que nunca rectificaría su error. Porque ese es el lado más feo de su persona: no rectificar nunca, no pedir perdón, no rebajarse, antes al contrario echar toda la culpa al otro. Pues si así se siente a gusto consigo mismo: peor para él, porque como sabiamente dice el refranero: DE BIEN NACIDO ES SER AGRADECIDO.

POR QUÉ SE ACUERDA TANTO DIEGO DEL ARGENTINO?

Porque no sabe lo que es el AMOR.

lunes, 21 de enero de 2013

EL MEU PRÒXIM VIATGE A SANTIAGO DE COMPOSTELA


Com que el meu pare sempre ha somiat visitar Galicia, i mai no ha aconseguit viatjar-hi,   li vaig proposar que hi podríem anar aquest any. Així que d'aquí no massa setmanes tornaré a rondar pels boirosos i aigualits
carrerons compostelans.





















EL ARGENTINO Y SANTIAGO DE COMPOSTELA. LOS INICIOS DE SU VIAJE A ESPAÑA.


EL ARGENTINO Y SANTIAGO DE COMPOSTELA. LOS INICIOS DE SU VIAJE A ESPAÑA.

LA EXCUSA PARA VENIR A ESPAÑA

Aunque cuando se le pregunta por la razón de su venida a España, el argentino siempre responde con aquello de: “ fue un impulso … algo en mi interior me decía que debía ir allí...”.  Lo cierto es que su aterrizaje en la península ibérica obedece a una coincidencia familiar. En efecto, si previamente alguno de sus parientes no se hubiera dejado caer por la Piel de Toro, difícilmente el argentino hubiese venido a parar por estos lares tan lejanos de su Buenos Aires natal.

CANARIAS,  MADRID, BARCELONA.

A Canarias recaló, esa es mi corazonada, porque allí vivían unos tíos y primos suyos.
Se trasladó más tarde a Madrid, aprovechando que su cuñada emprendía un viaje a Santiago de Compostela. Allí, en la capital española, lo fue a recibir a él y a ella, su hermano, quien en esos momentos residía en Barcelona, hacia donde el argentino encaminó sus pasos  con la intención de establecer su residencia. 
De la manera como me lo contó, parece ser que el golpe de gracia para que acabara viniendo a España fue ese viaje a Santiago de su cuñada, así al menos lo interpreté yo. Dicho lo cual, no estoy en condiciones de afirmar si el argentino ha pisado alguna vez suelo gallego. No creo que acompañara a su cuñada hasta el sepulcro del Apóstol ni tampoco que viajara allí por su cuenta y riesgo.

SANTIAGO, LO CRISTIANO Y EL PEREGRINO ARGENTINO

En mi mente siempre se asocia, seguramente sin demasiada consistencia, lo cristiano y el argentino, quizás por esto desde siempre haya creído que el argentino ha visitado el santuario gallego. Además él mismo se definía como un peregrino. No me parece nada descabellado imaginarlo portando el bastón de peregrino tan característico, del que penden una calabaza y una vieira, con un a abultada mochila a cuestas, rumbo a la majestuosa Catedral de Santiago. Quien una vez se deleitó con el silencio de los claustros benedictinos y la asombrosa paz de las cartujas, no debería sentir ningún reparo en iniciar una peregrinación que supone, para todos los que la emprenden,   una oportunidad de oro para la reflexión interior y para  el ahondamiento en la propia vocación espiritual, así como una ocasión irrepetible de establecer inolvidables lazos de amistad con otras personas afines.

MI PROXIMA VISITA A SANTIAGO DE COMPOSTELA.

Dentro de dos meses volveré a pisar, acompañado de mis padres, la maravillosa ciudad de Santiago de Compostela. No será, por supuesto, la primera vez, pero mis ganas de volver a contemplar la sobrecogedora monumentalidad de las callejuelas compostelanas no desmerecerá en nada a las que tenía la primera vez en que las transité emocionado. Pues bien, al hilo de mi inminente viaje a tierras gallegas, he estado barajando una idea que si bien por una parte me fascina, por la otra me repele.

INICIO Y FINAL DE MI “NOVELA” SOBRE MI CONVIVENCIA

Estos días estoy acariciando la idea de empezar el relato de dicha convivencia evocando las turbadoras sensaciones que recorrieron la  mente del argentino al enterarse de que su cuñada se dirigía a España, con la intención de visitar Santiago de Compostela, y al mismo tiempo describir esa especie de impetuoso arrebato que se apoderó de su alma, engendrando en ella el impetuoso deseo de cruzar el Océano Atlántico.

También me atrae la idea de acabar mi relato con una ilusoria peregrinación de los dos, de él y de mí, al sepulcro del Apóstol. Como tal cosa resulta absolutamente inconcebible, pues una peregrinación de esa naturaleza siempre supone, en el fondo, una aceptación de las propias faltas y errores, (no en vano la mayoría de los peregrinos medievales, y una parte considerable de los actuales, peregrinan en busca de la indulgencia plenaria), lo cual, atendiendo al orgullo indomable del argentino, es inviable, mejor sería concebir tal peregrinación como algo soñado  por mí. Un sueño reconciliador sería el final más hermoso para el relato. Además un final así supondría el triunfo de los valores cristianos sobre el egoísmo imperante en los tiempos modernos. Sería, sin duda, un final amañado, casi fraudulento, pero ya se sabe que lo literario y lo real pocas veces harmonizan. En general, la literatura sublima los aspectos más sombríos y repulsivos de la realidad. 
Sería un final magnánimo por mi parte. En lugar de concluir ofreciendo una imagen desoladoramente  sórdida del argentino, brindaría un final mucho más esperanzador y compasivo. Porque cada vez creo con mayor convicción que la actitud que hay que tener ante un tipo que en lugar de agradecer los dones recibidos, se complace en despreciar entristecer y humillar a quien le tendió una mano a cambio de nada, es la de la magnanimidad.

lunes, 14 de enero de 2013

EL ARGENTINO Y EL RESTAURANTE HINDÚ


El restaurante hindú

Cuando conocí al argentino, éste trabajaba en un restaurante de comida india regentado por dos paquistaníes. La dirección de dicho restaurante figuraba en una tarjeta que el argentino me introdujo clandestinamente en el bolsillo trasero de mis vaqueros. Curiosamente, en el dorso de esa tarjeta había el número de teléfono del argentino.
Lo normal es que lo hubiera llamado al día siguiente, así al menos se lo esperaba él; de lo contrario, no me explico su gran extrañeza porque hubiera tardado tanto en llamarle. Y es que en verdad tardé más de tres semanas antes de hacerle una llamada.


Si tardé tanto tiempo fue por la sencilla razón de que no lo veía muy claro. No sabía si el argentino compartiría mis objetivos. Si lo que yo buscaba coincidía con lo que él buscaba. Hoy ya puedo decir que no. No hubo coincidencia de intenciones.
En todo caso, aprovechando de que el restaurante donde trabajaba el argentino se ubicaba justo en la zona por la que me solía mover cada vez que me trasladaba a Barcelona, no pude resistir la tentación de pasar por delante de dicho restaurante y echar una ojeada a su interior. Al menos lo hice en tres o 4 ocasiones antes de decidirme a telefonear al argentino.
En efecto, casi cada vez que me desplazaba a Barcelona mi ruta solía ser: primero ir a los cines Verdi, situados en la calle del mismo nombre, donde se proyectaban películas en versión original, y luego dirigirme a una discoteca ubicada más abajo del restaurante hindú.

POR QUÉ NUNCA ENTRÉ EN EL RESTAURANTE A SALUDAR AL ARGENTINO?

En la parte delantera del restaurante, justo tras la puerta de entrada, toda ella de cristal por lo cual se podía vislumbrar el interior, había una barra, tras la cual estaba el argentino, esperando a posibles clientes. La verdad sea dicha: nunca vi entrar a nadie en ese restaurante, ni tampoco vi nunca a nadie sentado en uno de los taburetes, tomándose una copa. Creo que  esa falta de afluencia de clientes fue la razón por la cual el restaurante cerraría, unos meses después, sus puertas.
Nunca entré en ese restaurante porque, según mi forma de juzgar las cosas, eso hubiera significado una clara voluntad de compromiso por mi parte, lo cual   estaba muy lejos de mis intenciones.  No había ninguna intención por mi parte de establecer lazos sentimentales. A lo sumo buscaba una fugacidad placentera, por decirlo de una manera eufemística. Esa es la verdad pura y dura. Entonces, para no causar en el argentino la impresión de que yo quería fundar con él algo sólido nunca entré en ese restaurante.

LA LLAMADA AL ARGENTINO

Finalmente, le llamé. Quedamos en una disco, y allí se manifestó palmariamente la disparidad de objetivos entre los dos. Aunque hubo, en algunos aspectos, una evidente compatibilidad de acoplamiento, también es verdad que en otros  se evidenció un claro desencuentro en cómo encarar el futuro. Hubo una confrontación entre lo fugaz y lo permanente, entre lo superficial y lo profundo. A mí me hubiera gustado más establecer unos vínculos superficiales y fugaces, mientras que a él, al menos esa es la impresión que dejó traslucir, le hubiera gustado lo contrario. Sólo así soy capaz de entender los reproches que me dirigió tras la primera cita que tuvimos.

LA FALTA DE FRANQUEZA DEL ARGENTINO

El argentino siempre presume de ser muy directo, de no hablar a medias tintas, pero eso en general no es verdad. Es una persona muy insegura, y muchas veces le cuesta tomar una decisión. Muchas otras no sabe lo que quiere, y va errante de un sitio a otro, de una idea a otra, de un amor a otro, incluso de una religión a otra. Nada le convence. Su inseguridad lo tiene atenazado, impidiéndole un harmonioso desarrollo de sus potencialidades.
Tras unas semanas de no vernos, y con la incómoda sensación de que  la última cita quedó como “inacabada”, le envié un sms para preguntarle si quería verme otra vez. El hombre que presume de ser tan claro, tan directo, con las ideas tan bien establecidas, no fue capaz de decir sí o no. Con lo fácil que es, y no fue capaz. Me respondió que fuera libre y feliz, pero eso qué respuesta es. Además eso lo dijo por  que yo le había escrito que mi superYo dominaba a mi Yo, pero eso lo escribí como un gesto de complicidad con él, pues me había dicho que había estudiado psicoanálisis. De la misma manera que en el sms introduje algunos argentinismos como guiños. Eso del superyó, desgraciadamente no se dio cuenta, ERA UN GUIÑO. Lo cual no quiere decir que no sea verdad, pero en ese momento no lo dije pensando en si era verdad o no, sino solo para hacer un guiño. Me dio mucha rabia que no fuera capaz de darme  una respuesta. Simplemente: sí o no. Pues no le dio la gana.

POR QUÉ NO ME DIO UNA RESPUESTA?

Porque su soberbia no soportó que yo le hiciera semejante pregunta, como si me diera igual que me respondiera sí o no. En cambio, si yo le hubiera escrito: … me encantaría volverte a ver otra vez, porque eres un ser extraordinario, entonces seguro que me hubiera dado una respuesta. Quería sentirse idolatrado por mí, y como ese no fue el caso, pues por eso ignoró mi pregunta.

Por qué yo quería una respuesta?

Porque somos dos personas, no dos perros. Porque el argentino me confesó su gran admiración por las enseñanzas de Cristo y de San Francisco, y por lo tanto esa especie de relación no se podía acabar como si yo hubiera sido un objeto para él, o al revés. Debía acabarse civilizadamente. Es decir, despidiéndonos, como dos buenos cristianos.
Además había una gran posibilidad de que volviéramos a coincidir en una disco, como así pasó. Y entonces qué? Quedaríamos como dos imbéciles. Porque es que la verdad es que el argentino no contestó a la pregunta no porque no quisiera nada conmigo, sino porque quería que yo me lo hubiera “trabajado” más. Que eso es así se demuestra porque cuando coincidimos otra vez en una discoteca, en lugar de ignorarme, empezó a dar vueltas alrededor de mí. Es evidente que si no le hubiera interesado ni me habría dirigido una mirada.

POR QUÉ HE VUELTO A PASAR POR DELANTE DEL RESTAURANTE HINDÚ?

LA CASA DEL PINTOR NONELL
DIBUJO DE UN MENDIGO de NONELL
En primer lugar, me resulta muy fácil localizar la calle donde estaba el restaurante, porque justo al inicio de dicha calle, aún permanece en pie la casa donde vivió el gran pintor Nonell, en quien se inspiró el mismísimo Picasso para pintar alguno de sus cuadros. Este pintor catalán se especializó en pintar a marginados: enfermos, gitanos, viejos. Y desde hacía unos años llamó poderosamente mi atención. Unos cuantos años antes de conocer al argentino, me enteré de que en esa calle estaba el taller de Nonell, y desde entonces cada vez que pasaba por delante levantaba la cabeza para contemplar la terraza donde algunas gitanas posaban para el pintor. Me paraba unos segundos, dejando volar mi imaginación.
POBRES ESPERANDO LA SOPA de NONELL
Pues bien, este viernes quedé con un señor para comprar un libro sobre las ciudades de Úbeda y Baeza. Quedamos frente a la estación de metro de Joanic. Más o menos un poco más arriba del Passeig de Sant Joan. Pues bien, me di cuenta de que podía llegar allí desde  donde me dejaba el tren, si pasaba por la calle donde estaba el restaurante hindú, porque justo al final de esa calle, que va cambiando de nombre a lo largo de su recorrido, se localiza la estación de metro Joanic.  
Como hace casi más de dos años que no merodeaba por el barrio de Gracia, por los  mismos rincones que frecuenté  tantas veces durante mi juventud, me pareció una oportunidad de oro ir andando hasta la parada de Joanic. Una oportunidad que no debía desaprovechar. Quería volver a pasar por esos mismos sitios; quería dejarme embriagar por las sensaciones que  esos mismos sitios me evocaran. Así que volví a pasear por la Calle Verdi, por la casa del pintor Nonell, por la calle donde estaba el restaurante del argentino, etc.


La vida actual del argentino
UNA GITANA DE NONELL
Aunque no puedo entrar en detalles, porque no tienen ninguna relevancia para lo que quiero contar, sólo diré que en estos momentos su situación es muy parecida a la que tenía cuando le envié el mail para felicitarlo por su cumpleaños. 

MIS SENSACIONES AL PASAR POR DELANTE DEL RESTAURANTE HINDÚ

Si las primeras veces que pasé por delante de ese restaurante sentí una cierta excitación, ahora, muchos meses después, sentí una indiferencia decepcionante, como si pasara por delante de un montón de hojas muertas o de bichos espachurrados sobre el pavimento. Hasta podría decir que no sentí NADA.
NADA
NADA…
QUÉ TRISTE, DIOS MÍO¡¡¡
PROSTITUTA DESNUDA DE NONELL


EL RESTAURANTE HINDÚ ES AHORA


viernes, 4 de enero de 2013

NORBERTO: EL CAMBIO DE CRISTO POR HOTEI


NORBERTO: EL CAMBIO DE CRISTO POR HOTEI

AÑO NUEVO, DIOS NUEVO

CRISTO ES UN CASCARRABIAS, UN MARIMANDÓN Y UN AGUAFIESTAS



PÁSATE YA, HOMBRE POSTMODERNO, QUE HACES DEL RELATIVISMO LA VERDAD ABSOLUTA Y DE TU YO EL  VALOR SUPREMO, AL SONRIENTE BUDA GORDO


ÉL ES UN DIOS DE PUTA MADRE: COMPRENSIVO, CHISTOSO, BON VIVANT, Y, A SU MANERA, UN TIPO MUY ENROLLADO


OLVÍDATE DE LOS MALOS ROLLOS DE LA MORAL, DE LA PUTADA DEL INFIERNO, DE LOS FASTIDIOSOS DIEZ MANDAMIENTOS,


GOZA DE LA VIDA, NO TE TURBES POR NADA, VIVE COMO QUIERAS, NO TE AFLIJAS POR LAS CABRONADAS QUE HAGAS A LOS DEMÁS NI POR LOS REPROCHES DE LOS QUE UNA VEZ OFENDISTE O HUMILLASTE, NO SUFRAS POR LOS ACTOS DE LOS QUE TE ARREPIENTES, ENCUMBRA A TU YO HASTA LA ALEGRÍA MÁS DELIRANTE, OLVÍDATE DE TODO LO QUE, ENTORNO DE TI, TE JODE LA VIDA, FOLLA ALEGREMENTE SIN CARGOS DE CONSCIENCIA, EN FIN, SÉ COMPLETAMENTE FELIZ

NO TE TOMES PASTILLAS, NI VAYAS A LOS PSIQUIATRAS NI CONTRATES A CAROS MASAJISTAS O BUFONES,

EL SONRIENTE BUDA GORDO TE BRINDA LA SOLUCIÓN DEFINITIVA,:

CONTRA EL ESTRÉS DE LA VIDA MODERNA, CONTRA LOS  REMORDIMIENTOS QUE   TE CAUSAN TUS ACCIONES, CONTRA LOS SINSABORES DE LA VIDA, CONTRA LOS FRACASOS SENTIMENTALES O LABORALES, CONTRA LA SOLEDAD Y EL MAL HUMOR,

CONTRATA UNA SESIÓN DE YOGA

 Y YA VERÁS CÓMO TE RENUEVAS POR DENTRO, CÓMO TU YO SALE FORTALECIDO, CÓMO LO QUE ANTES TE ANGUSTIABA AHORA YA NO TE TURBA LO MÁS MÍNIMO, COMO CONSIGUES LA PAZ MÁS  PLENA CONTIGO MISMO Y CON LOS DEMÁS, VAMOS, OLVÍDATE DEL QUISQUILLOSO Y HOSCO CRISTO, Y PÁSATE AL SIEMPRE BONACHÓN Y CARIÑOSO BUDA GORDO

TU EGO Y TU SALUD MENTAL, NO LO DUDES, TE LO AGRADECERÁN ETERNAMENTE.