“Si tu hermano peca, repréndelo, y si se arrepiente, perdónalo” Lc 17, 1-6 (TODO PARECIDO CON LA REALIDAD ES PURA COINCIDENCIA)
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jueves, 21 de marzo de 2013
MI OPINION SOBRE NORBERTO, UNA ACLARACIÓN Y UN COMPROMISO
MI OPINIÓN SOBRE NORBERTO Y UNA ACLARACIÓN
POR SUS FRUTOS LOS CONOCEREIS
Puede ser que me equivoque, que
mienta adrede, que me deje llevar por mis malos recuerdos y mis desangeladas
experiencias con el argentino, puede que no sea imparcial, que no lo haya
reflexionado lo suficiente, se me pueden reprochar todas las anteriores
objeciones y muchas más, pero lo cierto
es que mi corazón me dice, con una convicción que no deja lugar a dudas, que el
argentino es, diciéndolo muy diplomáticamente, una MALA PERSONA ( y mira que me
pesa llegar a semejante conclusión, pero habiendo vivido lo que he vivido sería
muy hipócrita por mi parte concluir lo contrario). Al menos conmigo lo fue,
quizás me lo mereciera, quizás no, eso da más bien igual, porque MIRA que lo
tenía la mar de fácil para dejar un buen recuerdo, pero SUS MALOS ROLLOS, como
dice él, lo incitaron a comportarse con muy poca MISERICORDIA hacia mi persona.
Además, como debido a su soberbia, nunca o muy pocas veces rectifica, la impresión que me dejó fue particularmente descorazonadora.
Pero qué se puede esperar de quien es todo un AUTISTA ETICO, y sólo se preocupa de contentar a los que lo
adoran, mientras que a los otros, los que son algo críticos con él, QUE LOS
PARTA UN RAYO¡¡
Pero lo de ser mala persona no es
lo relevante, porque seguramente es tan mala persona como lo pueda ser yo, o lo
pueden ser muchísimas otras personas, lo que para mí resulta inconcebible es de
que fue mala persona justo con quien le tendió la mano. Creo que hay
circunstancias en la vida en las que uno debe evitar por todos los medios
posibles ser MALA PERSONA. Norberto debía haberse ido del piso antes de faltar
al respecto o dejar mal recuerdo ( pero se ve que le subía la autoestima aprovecharse de un pipiolo como yo).
Lo cierto es que desde que
abandonó mi piso, no ha dado ni una sola señal que me haga cambiar de opinión.
Nunca en mi vida me he sentido
más despreciado por mi manera de ser. No conoce el argentino las palabras de
Jesús: “quien esté libre de pecado que
tire la primera piedra”. Cómo puede ser que alguien con “ sus malos rollos”, con su infancia
oscura, sea tan poco generoso con los defectos de los demás?
Nunca he sentido alrededor de mí
la presencia de un ser menos capacitado para abrir su corazón a los demás.
No he conocido una alegría menos
empática que la suya ni una felicidad menos solidaria que la suya.
El argentino puede pasar por la
experiencia más terrible, y sin embargo, a causa de su soberbia,
contar a los demás que se siente el
hombre más feliz del mundo. Le falta el sentido de la objetividad.
LA FELICIDAD DESHONESTA Y SU CUCHI CUCHI
Como el mal sabor de boca que
causa en los demás no le importa demasiado, (para eso ha estudiado psicología,
para eso dice que tiene fe, para absolverse a sí mismo siempre que lo considere
oportuno), no me extraña que se sienta el hombre más feliz del mundo. Pero es,
la suya, la felicidad lograda a base de leer manuales de psicología, impostada
y poco espontánea.
UNA FELICIDAD DESHONESTA, y si no
que se lo pregunten al que él llamaba su "cuchi cuchi", sobre el cual dijo, ni más ni
menos: FELIZ A MÁS NO PODER CON MI CUCHI CUCHI.
Muy reveladoramente, al cabo de bien poco
tiempo esa felicidad estalló en mil pedazos, cada uno de los cuales se
desintegraron, sin dejar el menor rastro en la memoria de ambos.
¿ Cómo puede ser que en un
período de tiempo tan breve una persona pueda pasar de ser la responsable de la
máxima felicidad a alguien que “ no merece ser mirado otra vez”?
El argentino sobrevive buenamente
como puede, más porque su orgullo no le permite darse cuenta de la realidad,
que no porque las cosas sean como él quiere hacer creer a los demás, y a si mismo,
que son.
UNA ACLARACIÓN
Siempre va bien recordarle, al
argentino, que NUNCA LE PEDÍ QUE VINIERA A MI PISO. NUNCA.
Ciertamente le ofrecí, una vez
que me reveló su delicada situación anímica, mi piso.
No es lo mismo PEDIR QUE OFRECER.
PEDIR implica un interés, unas ganas por parte de
la persona que pide de que el otro acepte la petición. Expresa el deseo de
obtener algo de otra persona.
OFRECER, en cambio, es más bien
una acción neutral, que hace recaer el peso de la decisión en la otra persona. Consiste
en poner algo a la disposición de alguien.
No es lo mismo decir:
Norberto, por qué no vienes a mi piso?
Norberto, me gustaría que
vinieras a mi piso?
Que decir:
Mira, Norberto, tengo un piso; si
quieres puedes alojarte en él.
En el primer caso el que desarrolla
el papel activo es quien hace la pregunta, mientras que en el segundo caso es
el que responde quien tiene que mostrar el interés. Aceptar la primera es como
dejarse llevar, seguir el juego del otro, en cambio aceptar la segunda implica
llevar la iniciativa, ser el que toma la decisión final…
El segundo caso, es la respuesta
ante una necesidad planteada por el otro.
Yo, muy conscientemente, usé la
segunda opción. Le ofrecí el piso una vez supe que el argentino tenía que pasar
las noches en la calle.
En nombre de la verdad, debo
decir que se lo ofrecí porque supuse que no lo iba a aceptar. Ya sé que
haciendo semejante confesión no quedo en muy buen lugar, pero es la pura
verdad. Ni en los peores sueños me hubiera imaginado que el argentino estuviera
en una situación tan delicada. Me sentí TAN completamente desbordado por lo que
me dijo Norberto que tomé una decisión precipitadamente, sin sopesar los pros y
los contras. Actué demasiado a lo loco, cegado por la estupefacción que me
causó el imprevisible mail del argentino.
EL COMPROMISO DE NORBERTO
CREÁNSELO O NO, Norberto me
confesó que si había aceptado venir a mi piso fue porque así se COMPROMETÍA más. Su
voluntad de establecer un mayor compromiso, una implicación más intensa conmigo
puede ser verdadera o no. Si es falsa, lo deja a la altura del betún; pero si
es verdadera, entonces uno se pregunta para qué quería un mayor compromiso. La única
razón que se me ocurre a estas alturas es: PARA SENTIRSE MENOS SOLO, Y MÁS
QUERIDO, EN ESTE MUNDO.
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